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Aún sigue la limpieza de escombros a 12 meses del colapso del radiotelescopio

A un año del colapso, todavía continúan las labores de limpieza y recogido de escombros en el radiotelescopio de Arecibo, cuyas propuestas iniciales de reconstrucción se basan en una inversión de $400 millones.

La potente herramienta de 305 metros formaba parte del Observatorio de Arecibo, y antes de que colapsara el 1ro de diciembre de 2020, fue cuna de importantes hallazgos científicos a nivel local e internacional, además de ser destacada en varias películas de Hollywood.

Como las tareas de limpieza no han finalizado, la Fundación Nacional de las Ciencias (NSF, en inglés), entidad propietaria del Observatorio de Arecibo, no puede presentarle alternativas de acción al Congreso de los Estados Unidos, según la comisionada residente en Washington, Jenniffer González.

“Ya la fundación recibió esas propuestas de la Isla, pero hasta que no sometan el último informe, no pueden someter propuestas ni cuánto sería la inversión. Definitivamente no estamos hablando de reconstruir como estaba, porque ha habido cambios en tecnologías”, explicó González a EL VOCERO.

La comisionada residente esbozó que luego del colapso, se aprobó legislación federal para que las sugerencias de la NSF estuvieran sujetas a la rendición de informes sobre el proceso. La Administración Nacional de Aeronáutica y el Espacio (NASA, en inglés) también ha recibido actualizaciones pertinentes a los trabajos.

González añadió que la firma de ingenieros Thornton Tomasetti debe presentar el tercer y último informe al Congreso en diciembre, pero debido a que generalmente el plazo se extiende, la entrega podría dilatarse hasta marzo.

“Se ha avanzado. Nosotros fuimos en verano y todavía estaban removiendo cables y platos. No son solo piezas, sino el impacto ambiental, porque es un área de difícil acceso. Los fondos, algunos son apropiaciones del Congreso, algunas partes vienen de fondos NSF, consorcios privados, universidades, por eso el tercer informe es tan importante”, puntualizó González.

La comisionada residente se apresta hoy, miércoles, a presentar una nueva resolución congresional “dándole seguimiento y para hacer cualquier reclamación de fondos adicional”.

Durante el verano, en un foro con un puñado de congresistas, la administración del Observatorio de Arecibo, representada por Francisco Córdova, presentó una propuesta de reconstrucción que conllevaría la inversión mínima de $400 millones.

No obstante, la propuesta no es final y firme y la NSF no la ha adoptado como plan de acción.

NSF sigue limpieza

En marzo del año en curso, la NSF, la Universidad de la Florida Central (UCF), el Observatorio de Arecibo y un equipo de contratistas comenzaron la limpieza de emergencia en los predios con el recogido de materiales y escombros.

En estimados preliminares, las labores de limpieza oscilaban entre $30 millones y $50 millones. Para el 17 de noviembre, la tarea no había finalizado, pero la entidad federal subrayó que estaba “casi completada”.

“Los siguientes pasos incluyen completar las reparaciones en las áreas con concreto dañado, retirar los vehículos y equipos de trabajo del sitio y almacenar los artículos recuperados. El equipo continúa estabilizando las estructuras restantes para continuar con las operaciones seguras y revegetar las áreas afectadas por el colapso”, de acuerdo al informe rendido por la NSF.

El observatorio es administrado mediante el convenio colaborativo entre la UCF, la Universidad Ana G. Méndez y Yang Enterprises.

Sin comunicación

El alcalde de Arecibo, Carlos “Tito” Ramírez, reiteró que pone los recursos del municipio a disposición de los entes pertinentes para restaurar las instalaciones, ya que el observatorio sirve como atracción educativa y turística.

Sin embargo, “al momento, la comunicación con la gerencia del lugar, la cual está bajo el gobierno federal, es nula”, de acuerdo a Ramírez.

“Estamos listos para asistirles en lo que necesiten dentro de las limitaciones que tiene el municipio. En términos económicos, definir el impacto causado por el colapso del radiotelescopio es difícil. Sin embargo, la realidad es que todavía las personas visitan el lugar. Debo destacar que aún así, desde que asumí las riendas de la administración municipal, implementamos una agenda de actividades turísticas y culturales, mediante las cuales fomentamos que personas de pueblos aledaños visiten Arecibo”, aseguró Ramírez en declaraciones a EL VOCERO.

El alcalde reiteró el aporte científico, económico y turístico que representa el Observatorio de Arecibo, porque también es un motor económico para el barrio Esperanza.

Aunque el radiotelescopio colapsó, otras partes del observatorio continúan activas.

Esfuerzos efímeros

El radiotelescopio comenzó a dar señales del posible colapso desde agosto de 2020, fecha en que la rotura de un cable auxiliar produjo daños al plato principal. Luego, en noviembre, un segundo cable se rompió, lo que provocó daños a la antena.

Un grupo de estudiantes e integrantes de la comunidad científica de Puerto Rico creó una campaña dirigida a salvar el Observatorio de Arecibo y reconstruirlo, lo cual provocó una ola de mensajes virales en las redes sociales con los ‘hashtags’ #SavetheAreciboObservatory y #RebuildTheAreciboObservatory.

Ante el interés de la ciudadanía, la entonces gobernadora Wanda Vázquez asignó $8 millones para aportar al fondo de reconstrucción del radiotelescopio en diciembre de 2020. Sin embargo, al presente el gobierno no ha hecho desembolso alguno para el Observatorio de Arecibo, confirmó la Oficina de Gerencia y Presupuesto (OGP) a este rotativo.

Vázquez asignó los fondos mediante la orden ejecutiva en la que también declaró como política pública la reconstrucción de la instalación, a solo cinco días de dejar la gobernación en manos de Pedro Pierluisi.

En la conferencia de prensa, Vázquez aseguró que la orden emitida ayudó a declarar como zona histórica los predios donde se encuentra el Observatorio de Arecibo.

Para esa fecha, la NSF había comenzado las labores de limpieza y los expertos planteaban que reconstruir el radiotelescopio —tal como estaba o construyendo uno nuevo— podría tomar de tres a 15 años.

Hasta el momento en que colapsó, mantenía el título del radiotelescopio de radar más sensible y poderoso del mundo.

En su larga lista de descubrimientos se encuentra haber encontrado planetas en otras estrellas y ser el primero en detectar correctamente la rotación del planeta Mercurio, entre otros.

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