Por: Isabel Martínez Farrington, líder ambiental TIN Región Este  
 
A los 12 años participé de mi primer Taller de Inmersión en el 2012, un taller nivel 1 en la reserva de las Cabezas de San Juan en Fajardo. En ese taller logré resaltar partes de mí que nunca había tenido la valentía de enseñar ni desarrollar. Siempre supe que quería ejercer estudios en las ciencias ambientales, pero ser partícipe de los talleres y programas de voluntariado me ayudó a definirlo mejor. Desde ese primer año como participante, nunca paré de asistir a los Talleres de Inmersión. El año siguiente participé en un nivel 2, y luego todos los años como líder tanto en las Cabezas de San Juan como en Medio Mundo y Daguao en Ceiba.  
 
Claramente, los talleres me han ayudado a crecer como individuo, pero más aún como miembro de un colectivo que realmente le apasiona la conservación y el estudio del medio ambiente. Además de la ciencia, siento una pasión por la educación que el Taller de Inmersión me ha dado. Ser líder conlleva impactar a vidas y mentes en desarrollo, vidas de muchos participantes que luego deciden ser líderes como yo.  
 
Todo lo que aprendí sobre el ambiente que nos rodea, lo duplico y lo paso a la próxima generación. La satisfacción de saber que mis esfuerzos pueden generar un cambio positivo es una fuerza impulsora para mí. Habiendo tenido todas estas experiencias junto al Taller de Inmersión, ahora soy bióloga marina, graduado de la Universidad de Puerto Rico en Humacao.