Un evento cataclísmico de la magnitud del producido por los huracanes Irma y María afecta dramáticamente el ambiente natural y sus componentes de flora y fauna. La destrucción de arboledas no solo resulta en daños físicos a los arboles sino que también afecta su función importante como sitios de anidaje y fuentes de alimentación para distintas especies de animales. Todos hemos experimentado el corportamiento inusual de abejas y aves en los días y semanas después del huracán.

La fauna política, sin embargo, resulta mucho más resistente a los embates de huracanes, no importa la categoría. Algunos han desarrollado la capacidad de almacenar recursos y alimentos (aunque no han aprendido que no se debe hacer en contenedores de basura). Otros han aprendido a hacer conexiones eléctricas.

Peces Blancos han recibido de parte del gobierno Rosselló un contrato leonino para participar de los trabajos de restablecer la energía eléctrica. Sin embargo, el contrato ha sido cuestionado y prometen que será objeto de investigaciones a ambos lados del “gran océano” de Donald Trump por, entre otros factores, ser a una compañía desconocida y aparentemente sin empleados.

Por otro lado, Rosselló también otorgó un contrato de $300,000 y por unos pocos meses a otra compañía norteamericana para, prepárense, generar “publicidad y relaciones públicas” para la Autoridad de Energía Eléctrica. El secretario de Relaciones Publicas de La Fortaleza, Ramón Rosario, justificó la acción porque “la AEE tiene que hacer un esfuerzo de comunicar todo lo que está haciendo”. La AEE es una corporación pública, está en bancarrota, no ha podido restablecer la energía en más de un mes y no tiene competencia comercial.

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