De manera acertada, el Grupo de Trabajo utilizó entre sus referencias la Guía de Estrategias para la Adaptación elaborada por el Consejo de Cambios Climáticos. El acervo de este Consejo de más de un centenar de científicos y otros expertos de la isla puede aportar a la toma de decisiones confiables.

Puerto Rico necesita contar con una política integrada que, además de mitigar, nos prepare para resistir y recuperarnos de inmediato de los impactos del cambio climático. Estos incluyen sequías, huracanes, aumento sostenido en el nivel del mar, epidemias y nuevas enfermedades.

Este mismo viernes, la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA) puso en vigor un plan de racionamiento para pueblos del noroeste debido a los bajos niveles en el embalse Guajataca. Todavía esta semana, el Monitor de Sequía de Estados Unidos marcaba la mayor parte de Puerto Rico como área anormalmente seca. En una vasta zona del sur y áreas del centro la sequía alcanza grado de moderada.

En días recientes, la Organización Mundial de la Salud advirtió que el cambio climático y la contaminación ambiental lideran la lista de las 10 amenazas principales a la salud. Nueve son familiares a Puerto Rico.

Ambas instancias ilustran el carácter multidimensional del cambio climático y la urgencia de actuar.

Al grupo multisectorial, creado por Orden Ejecutiva, le tocaba establecer y recomendar iniciativas de política pública dirigidas a proteger el ambiente y mitigar el cambio climático. Además de miembros del gobierno central, el grupo tiene representantes de la legislatura y del sector privado.

En el documento enviado al gobernador Ricardo Rosselló, el grupo resumió en diez páginas tres reuniones celebradas entre el 10 de diciembre de 2018 y el 25 de enero de 2019, con al menos seis acuerdos. El resto del informe, de 27 páginas, es una lista de proyectos en curso o propuestos, enumerados por las agencias de ambiente, salud, educación, desarrollo económico e infraestructura.

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