Fo… nada huele peor que el crimen ambiental y la apatía del Gobierno.

Más que el hedor a caca que desde unas tuberías la bautiza, la quebrada Los Cedros en Peñuelas apesta a inacción gubernamental y a posible chanchullo.

Por un lado, está el mal olor de la dejadez de las autoridades pertinentes y por el otro fluye una aparente irresponsabilidad hedionda, enfocada en la velaera’ de güira de empresas privadas, entre ellas, se alega, ALV Development, a la cual ya los federales le cursaron una carta para investigar posibles violaciones a la Ley de Agua Limpia federal (Clean Water Act).

Un derrame de aguas usadas y pestilencia emana desde una estación de bombas sanitarias en Miramontes, Peñuelas. Hace más de cinco años que este chorro de excremento afecta la quebrada Los Cedros y pone en jaque la salud de los residentes de tres comunidades aledañas: Parque de Miramontes, Parcelas de Santo Domingo II y los residentes del sector El Sumidero.

Además, uno de los principales ecosistemas del carso de Puerto Rico, un área natural protegida en el Municipio de Peñuelas conocida como Cuevas El Convento, está en peligro.

La organización Para La Naturaleza, una unidad del Fideicomiso de Conservación de Puerto Rico que protege el área natural conocido como Cuevas El Convento, denunció hoy desde el lugar de los hechos lo que apunta a ser un patrón de carencia de atención de parte de agencias como la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA), el Departamento de Recursos Naturales y Ambientales (DRNA), la Agencia de Protección Ambiental (EPA, por sus siglas en inglés) y el propio Municipio.

“El pasado 11 de febrero, Para La Naturaleza supo de una descarga sanitaria a la quebrada Los Cedros desde una estación de bombas de aguas sanitarias ubicada en la Urbanización Parque de Miramontes (Bo. Santo Domingo, Calle C8, PR-132, km7.9) en Peñuelas, y rotulada con la identidad corporativa de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA)”, reza una comunicación emitida por la organización, que en la mañana de hoy, jueves, se presenció en la zona afectada para hacer la denuncia junto a vecinos del área y miembros de la Sociedad Espeleológica Unidad del SUR (SEUS).

La quebrada Los Cedros desemboca en el sistema de cuevas El Convento.

“Esta importante área de captación de agua en la zona cársica del sur sufre de un derrame de aguas usadas que llega al sistema de cavernas a través de la quebrada”, destacaron los miembros de la organización Para La Naturaleza.

Según indicaron, desde febrero han estado monitoreando la situación y han utilizado los recursos administrativos a su alcance para buscarle la solución a este grave problema ambiental y de salud pública.

Las personas que residen en las comunidades afectadas apenas viven a unos 150 metros del derrame de aguas sanitarias.

“Se radicó una querella ante el DRNA y la EPA.  Además, hubo reuniones con la Oficina de Infraestructura de Ponce de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados, Ing. Ausberto Santiesteban, el Municipio de Peñuelas y con representantes de la Junta Comunitaria de la urbanización”, indicaron. 

“Los resultados de una investigación preliminar apuntan a que la jurisdicción de esta bomba la tiene un desarrollador privado, a pesar de que la bomba tiene un rótulo de la AAA, debido a que no se completó el traspaso de la facilidad. Mientras, la bomba sanitaria continúa hoy en día derramando aguas usadas a la quebrada”, señalaron.

“Las comunidades están muy preocupadas por esta situación ya que, alegan, ocurre desde el 2018 y sigue agravándose. Tanto Para la Naturaleza como los vecinos, también estamos preocupados, por lo que solicitamos que la AAA pueda reevaluar el caso e intervenir para remediar la situación.

Hoy, el derrame sigue en la quebrada Los Cedros, luego que la empresa que desarrolló la urbanización Parque de Miramontes dejara de darle mantenimiento. Según informaron los vecinos de las comunidades afectadas, el desarrollador construyó las bombas e infraestructura, pero nunca se las pasó a la AAA, aunque las estructuras tienen logos, identidad corporativa y colores de la AAA, y a pesar de que a los vecinos se les cobra por servicios de alcantarillado.

Mariana Rivera, superintendente de la región sur de Para la Naturaleza, se ha reunido dos veces con el Municipio de Peñuelas. Hasta el momento, ninguna agencia quiere tomar jurisdicción. De esta quebrada alimenta un sistema cársico importante para la captación de agua y un área natural que alberga especies protegidas y en peligro de extinción.

DRNA y EPA tienen querellas radicadas por Para la Naturaleza y la SEUS. La EPA realizó una inspección e identificó a una persona de nombre Alejandro Amador de la empresa ALV Development como el responsable.

Cuarto Poder (WAPA-TV) intentó comunicarse con Amador pero al momento no ha respondido llamadas ni mensajes de texto.

La urbanización fue construida en la década del 2000, a pesar de la oposición de las comunidades cercanas y la comunidad ecológica, quienes advirtieron de las consecuencias ambientales.

Un problema de años

En conversación con Cuarto Poder, el presidente de SEUS, José Díaz, recordó que este problema data “desde mucho antes del huracán María”, que solo sirvió para exacerbar la contaminante situación. Aludió a que el génesis de este lamentable asunto radica en la mala planificación y construcción de la urbanización Parque de Miramontes, “que ni siquiera se terminó de construir” y cuyo sistema de desperdicios sanitarios “contemplaba en llevarse mediante una tubería que la transportaría hacia el sistema alcantarillado de Peñuelas”.

“Aquí ha habido 20 mil dificultades con esta urbanización, en especial por sus niveles de agua, ya que está encima de un sumidero y de un área de captación de cuevas únicas en el Sur, con ríos subterráneos. Esto lo construyeron justo al norte del sistema que se nutre de un río subterráneo y el daño es incalculable”, apuntó.

En los ecosistemas de esta área natural protegida se han documentado un total de 96 especies de fauna y unas 218 especies de flora. En esta rica diversidad están representadas 11 de las 17 especies de aves endémicas de Puerto Rico, que constituye más de dos terceras partes del total.

Díaz señaló que en enero de este año, la SEUS acudió a la EPA para realizar una querella, pero que “no fue hasta finales del mes pasado cuando se comunicaron mediante el ingeniero Ortiz, que envió una copia de un informe”.

“En ese informe se confirma que el abandono ocasionó una violación al Clean Water Act, que la empresa de Amador estaba en violación. Le enviaron el informe al desarrollador y se supone que el próximo paso sea una orden de actuar”, expresó Díaz.

Reaccionan EPA y AAA

Mientras el crepúsculo caía, la presidenta ejecutiva de la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA), Damaris Santini, señaló a Cuarto Poder mediante declaraciones escritas que “al día de hoy, el desarrollador y dueño del proyecto Urbanización Parque Miramontes en Peñuelas, ALV Development, no ha completado los trámites correspondientes para la cesión y el traspaso de la estación de bombeo sanitaria hacia la Autoridad de Acueductos y Alcantarillados (AAA)”.

“Aunque la AAA aprobó los planos de construcción de dicha estación y verificó el funcionamiento de la misma, los desarrolladores del proyecto no completaron los trámites legales para el traspaso de la estación hacia la Autoridad por la cual, sigue siendo una privada y de entera responsabilidad del desarrollador. Este caso se encuentra en la división de Proyectos Públicos Privados de la Región Sur”, destacó.

“Como parte del compromiso de la AAA con la protección del medio ambiente, diligentemente referimos la situación a la Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA), para su investigación y acción correspondiente. De igual forma, estaremos el lunes, 16 de mayo, en una vista ocular convocada por la Legislatura Municipal”, apuntó. 

Mientras, la EPA confirmó lo reportado más temprano por Cuarto Poder, al confirmar que “durante los últimos meses, la División de Protección Ambiental del Caribe de la Región 2 de la EPA ha recibido varias querellas sobre descargas de aguas usadas de una estación de bombas sanitaria ubicada en el complejo residencial Parque Miramonte que llegan a la quebrada Los Cedros y al sistema de cuevas El Convento en el barrio Santo Domingo en Peñuelas”.

“Las denuncias fueron presentadas por la Sociedad Espeleológica del Sur, Para La Naturaleza y la Asociación de Vecinos de Parque Miramonte, entre otras. La EPA realizó una inspección el 5 de abril de 2022 y preparó un informe”, expuso la agencia federal.

“La Agencia actualmente está evaluando la información que ha recopilado para determinar el próximo curso de acción. La EPA también ha referido este asunto al Departamento de Recursos Naturales y Ambientales de Puerto Rico”, agregó.

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