Como arquitectos y urbanistas el adecuado funcionamiento de la ciudad y las relaciones que existen entre los distintos factores que la hacen un ser vivo son siempre preocupaciones qué tenemos en mente en nuestras propuestas. Sin duda la infraestructura es una de las características que más moldea a una ciudad.  Pero,  ¿qué pasa cuando la infraestructura no se emplea de la manera más adecuada? Justamente, los arquitectos Alberto Kalach y Teodoro González de León, junto con un equipo de especialistas, apuestan por una implementación de infraestructura qué garantice un mejor aprovechamiento de los recursos naturales.

Debido a los problemas de abastecimiento de agua en diferentes localidades de la Ciudad de México, nos hemos cuestionado cuales son las posibilidades arquitectónicas y urbanas que nos pudieran ayudar a resolver este problema. Si bien, una de las necesidades básicas que se deben cumplir en cualquier asentamiento humano es indudablemente el agua. No es coincidencia que  muchas de las ciudades más antiguas florecen cerca de ríos y lagos que proveen agua potable para la supervivencia del hombre. Aunque hoy día no parezca, la Ciudad de México no es un caso diferente al que se menciona anteriormente.

Los primeros pobladores del valle de México quienes fundaron la ciudad lo hicieron en diferentes puntos incluyendo un islote en el lago de Texcoco. Con grandes cantidades de agua, tuvieron que aprender a vivir en harmonía con ella y establecer un sistema de chinampas y canales para uso agrícola y hacer espacio para monumentos ceremoniales y otros espacios urbanos. Donde una vez había un sistema con cinco lagos hoy solamente se preserva uno.

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