Menú

Urgen acciones más aceleradas para reducir la contaminación

Puerto Rico cuenta hace dos años y medio con legislación que promueve reducir los contaminantes en el aire, pero su implementación ha sido, como mucho, inconsistente, apuntó el catedrático de Salud Ambiental del Recinto de Ciencias Médicas de la Universidad de Puerto Rico (UPR) Pablo Méndez Lázaro.

La Ley de Mitigación, Adaptación y Resiliencia al Cambio Climático (Ley 33 de 2019) encamina una serie de acciones que llevarían al país a gozar de un ambiente más limpio, como reducir las emisiones de gases de efecto de invernadero. Para ello, promueve la transición a un modelo sin el uso de combustibles fósiles para la producción de energía eléctrica, el uso de sistemas de transporte más limpios y disminuir el depósito de desperdicios sólidos.

“Hay cambios (favorables) en la política pública, pero hay que acelerar los procesos y ponerlos a correr. Hay cierta voluntad, pero hay que darles más celeridad a los procesos”, señaló Méndez Lázaro.

El profesor universitario apuntó que, bajo la Ley 33, se estableció que el gobierno no puede comprar vehículos de quema de combustible fósil desde el año pasado. El incumplimiento con esta disposición ha quedado en evidencia entre alcaldes y miembros de la Legislatura que siguen adquiriendo carros de este tipo.

Del mismo modo, señaló que las plantas de energía eléctrica que utiliza el gobierno en casos de emergencia no cumplen con los parámetros de calidad de aire.

“Son plantas obsoletas. Hay que actualizarlas o cambiarlas”, reiteró.

“Los mismos hospitales y centros comerciales queman combustible en pleno centro de la ciudad (cuando usan generadores eléctricos). Cada vez que hay apagones nosotros mismos deterioramos la calidad del aire”, añadió.

Otras disposiciones de la Ley 33 aún tardarán, advirtió Méndez Lázaro. Por ejemplo, la generatriz de Applied Energy Systems (AES), en Guayama, que produce electricidad a base de la quema de carbón, continuará en operaciones hasta 2027.

El experto advirtió que urge planificar el país para darle paso a acciones que promuevan una isla con menos contaminación.

“Para promover a nivel isla vehículos menos contaminantes hay que repensar la infraestructura. Por ejemplo, dónde recargar y cómo disponer de estas baterías, porque si no vamos a tener el mismo problema de los neumáticos (acumulación excesiva)”, dijo.

Asimismo, se debe pesar cuál sistema de energía renovable –como placas solares, energía del mar y molinos de viento, entre otras- es el más adecuado para el país.

Por su parte, el doctor Rafael Méndez Tejeda, catedrático del Departamento de Ciencias Naturales de la UPR en Carolina, comentó que la ciudadanía tiene en sus manos el poder de reducir la contaminación.

Por ejemplo, mencionó cómo la siembra de árboles ayuda a limpiar el ambiente de contaminantes, además de que promueven la reducción del calor.

Resaltó, además, que el gobierno no se debe concentrar solo en dar ayuda para los más pobres, sino que debe considerar otorgar ayudas a la clase trabajadora que, por ejemplo, quiere moverse a energía solar en sus hogares.

LEA LA NOTICIA COMPLETA EN ELNUEVODIA.COM

Contáctanos